domingo, 22 de julio de 2012

¿ES VILLA ESTEIN UN OPERADOR DE LA MAFIA?

¿ES VILLA ESTEIN UN OPERADOR DE LA MAFIA? Marco V. Santos DLG. Cuando aún el ciudadano Villa Estein era presidente de la Corte Suprema, se observaba una serie de hechos irregulares que venía cometíendo en su gestión como es el caso del acoso a su personal administrativo, el agravio permanente a los magistrados propios de una persona bipolar que pide a gritos una camisa de fuerza, como es el caso de acusar a su colega San Martín de intentar dar un golpe de estado en su fuero para caviarizar juzgados y tribunales con gente de su entorno o el de hacer lo indecible para perennizarse en su cargo, poniendo trabas y obstaculizando la correcta administración de la justicia, a la par de entrometerse en asuntos de la familia Humala Tasso y en otros asuntos ajenos a su cometido; con todos éstos axabruptos ya se vislumbraban las atrocidades que perpetraría en agravio de la justicia de los que menos tienen y de la imágen de la justicia peruana en el ámplio espectro internacional sobre todo cuando los manotazos de ahogado de la mafia fujimontesinista se hacen más evidentes en todos los rincones de la nación. En efecto ahora estamos viviendo y sufriendo las consecuencias de la decisión desatinada y nefasta del CNM al haberlo ratificado en la magistratura judicial nacional a sabiendas de su carencia de ética profesional y de su inconducta irracional que a puesto no sólo su nombre y apellidos sino la dignidad de la administración de justicia tan venida a menos, en el fondo del peor de los mingitorios que desemboca en el río Huatanay. Con la sentencia de hace unas horas emitida por la Sala Penal Permanente presidida por el vocal de marras, lo cual ha asombrado a propios y extraños, a los mismos deudos y familiares de caídos del pueblo inocente, a los reos en carcel uniformados, engalonados y condecorados y hasta al mismísimo abogado Nakasaki defensor de cuanto corrupto se le cruza en la calle, se ve un franco y evidente retroceso en todo lo actuado y avanzado en la jurisprudencia sobre el terrorismo de arriba y de abajo, el de los alzados y el del Estado. Cuando flaquean las fuerzas del Estado con los gobiernos de turno en la defensa del estado de derecho y de la acción política en aras de mantener el orden social a lo largo y ancho del país debido a su inexperiencia e improvisación, y el sistema mediático atosiga al pueblo con informaciones intrascendentes propias de una prensa amarilla, es entonces cuando los corruptos de cuello y corbata enquistados en los poderes del estado sean autónomos o no, hacen contubernios con abogados, apoderados, representantes y ayayeros de los corruptos encarcelados y de los aún libres para reunir suculentas bolsas de dinero mal habido para rellenar los bolsillos de magistrados como Villa Estein y alterar y cambiar sentencias bajo argumentos jalados de los cabellos, ésto sin medir las consecuencias sociales y de protesta de los gremios, sindicatos, federaciones y pueblo en general, de los deudos y agraviados moral y materialmente de la nación indígena, campesina, criolla y desempleada que no tiene quien la defienda de los mafiosos Fujimori, Montesinos, Hermoza, Damico, Bello, Dianderas, Pérrigo y otros innombrables que saltan en un pie al saber que gracias a Villa Estein no han cometido delito alguno contra los DDHH o de lesa humanidad y que Abencia Meza, Gringasho y los Huachiturros son los únicos peligrosos del país. De continuar el CNM ratificando y nombrando a magistrados corruptos como Villa Estein nos veremos una encrucijada tal que los casos de Cajamarca, de Espinar y del VRAE serán una zapatilla ante la libertad por indulto de Kenya Fujimori y Vladimiro Montesinos, de los generalotes victoriosos en el latrocinio y de las indemnizaciones millonariass que pedirán al Estado peruano por haberlos encarcelado sin culpa alguna y haber mansillado sus nombres y el honor de sus familias. Dios salve a la patria. En el Cusco hemos tenido magistrados de la misma catadura moral del tristemente célebre octogenario Villa Estein, como es el caso de aquel que destruyó las gradas de piedra del palacio de justicia para colocar dos aves carroñeras en su frontis, en clara alusión a su modis operandi y ante el reclamo popular los buitres de la justicia fueron arrinconados en la puerta posterior del edificio que dá a la calle Afligidos. http://PARNASOPPSLIBRESXXIBLOGSPOT.com/