GEOPOLÍTICA, DEMOCRACIA Y SOCIEDAD

La Geopolítica y la Geoeconomía caminan agarradas de la mano con la democracia y estas cumplen sus cometidos como ciencias que son, de lograr primeramente el desarrollo de los Estados y luego el bienestar de los pueblos, con calidad de vida y seguridad en su existencia, siempre y cuando el gobierno de los pueblos sea del pueblo y para el pueblo, vale decir sean auténticas democracias y no remedos de estas.
Se habla de seudo democracias como la peruana cuando estas están basadas en elecciones que de una u otra forma se cumplen en los plazos previstos, pero cuentan con componentes como los partidos políticos apropiados y adeñuados por líderes corruptos enquistados en ellos para vivir de sus movimientos y del Estado por intermedio de sus congresistas infiltrados permanentemente en el congreso. Estos partidos en el Perú pueden ser eternos y muy antiguos y por tales flamean planes y políticas desfasadas, también pueden ser muy nuevos, sin plataformas, sin planes de gobierno, sin planchas para las vicepresidencias, congresales, regionales ni municipales, siendo por tanto improvisadas y sin norte alguno.
Empero entre los operadores de la democracia peruana no solo está el Estado mal organizador y los partidos desfasados o improvisados, sino el el pueblo elector que acude a las urnas obligado con sanciones y multas pecuniarias y administrativas si no vota, sino que aparte de ir en forma coercitiva, lo hace a sabiendas que es iletrado y analfabeto, llegando a enterarse de los candidatos, de sus símbolos, sus números eletorales y otros, recién en la cola para su mesa de votación, en donde consulta a los demás y estos le pintan en forma sutil en el brazo el partido y el candidato por quien debe votar.
Pero es que en el Perú nadie ha notado semejante deficiencia del voto analfabeto, que a la postre es peligroso y da verguenza ajena?.No, esta característica es por todos conocida, pero no sus motivos y objetivos, ya que esta radica en la necesidad de los felones y angurrientos por la mamadera del Estado, de aprovecharse de ese sector iletrado para engañarlo con discursos demagógicos de los vendedores de cebo de culebra que deja a los paisanos en estado catatónico y demencial, ofreciéndoles el oro y el moro en planes de gobierno improvisados y fraguados por políticos ineptos y antipatriotas. Se imagina un pueblo elector sin analfabetos e iletrados, pues no habría a quien engañar y los corruptos serían conocidos al revez y al derecho por la población leída y con un poco de cultura y educación, por tanto no tendrían quien los elija y no accederían al mando político de la nación y morirían de hambre e inanición con sus familias y congéneres incluidos. Similar perfil tenemos con la dificil e imposible desaparición del narcoterrorismo en la selva del VRAE y del flagelo y tanto daño que causan los friajes en el sur del país en tiempos de sequía y heladas y de las riadas, huaycos y avalanchas en sierra y selva en épocas de lluvias. Ambas circunstancias que afectan y causan tanto daño a la población nacional más necesitada, origina que se declaren zonas y estados de emergencias para que los sátrapas enquistados en las diferentes instituciones militares y civiles se engullan y expolien los dineros destinados a la atención de los damnificados, pisoteando de los cuellos los cadáveres de los soldados caídos en combate y de los campesinos y aborígenes que quedaron más calatos que ayer y antier.
Hablando de este tema que trastoca y altera cualquier ordenamiento democrático y geopolítico nacional en aras de lograr superar las políticas de los Estados oponentes, es necesario recordar a aquel médico anciano que citó a su hijo, también médico joven él y le dijo que era muy viejo y ya no veía bien, no escuchaba bien, no podía manejar ni movilizarse en el auto, estaba achacoso y con muchos dolores en el cuerpo y por tanto le cedía a todos sus pacientes que casi sumaban cien para que él como su hijo médico se haga cargo de la atención médica y facultativa. El obsequio de semejante catidad de pacientes para el médico joven por parte de su padre, fue recibido con gran alegría y satisfacción por el nobel profesional. Transcurridos seis meses el hijo visitó a su padre y muy contento le dijo que había atendido a todos los pacientes cedidos y que inclusive los había sanado y curado a todos. Ante esto el anciano médico le dijo que como había cometido semejante burrada, ya que si los había sanado y curado a todos, entonces de que iban a vivir a partir de la fecha.
MARCO V. SANTOS
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