LOS MISERABLES

No solo Victor Hugo tuvo la pena de conocer la miseria de los miserables de Paris y lo implacable del inspector Javert, sino que los peruanos y especialmente los cusqueños tenemos la mala suerte de conocer y hasta vivir con nuestros miserables paisanos unos metidos a dirigentes del único equipo de la liga profesional de futbol que se apropiaron hasta de los buzos y los sueldos de sus jugadores y pasar de su condición de vagos y desocupados eternos a ser jugadores de casino, propietarios de hoteles allá y acullá y de tener decenas de mujerzuelas como convivientes y compañeras de juerga, mientras otros están metidos de autoridades de la región que en complicidad con los otros del JS expoliaron los dineros y economías del Cusco, para beneficio propio y de sus concubinas que deambulan por los pasadizos del gobierno regional, estando algunos aún prófugos y otros en celdas doradas en la carcel de Quencoro. Nuestra ámplia gama de miserables no concluyen con estos cuatro gatos sino que se amplia hasta los candidatos reeleccionistas en las municipalidades provinciales y distritales, que abusando de la ignorancia de sus paisanos y congéneres hacen y deshacen a su antojo el manejo de sus municipios, con construcciones baladís y sin importancia como el de hacer pisinas olímpicas sin que hayan en sus pueblos un buen hospital, hacer festivales con grupos de cumbia de la capital con un grupo de prostitutas llamadas bailarinas, sin tener buenos centros educativos para su población escolar, engullirse el dinero del cánon del gas en jugosos sueldos para empleados ineptos y fantasmas.
También conforman la selección de miserables cusqueños el alcalde provincial reelecto que se a propuesto meterle cemento a toda área verde como la que circunda el óvalo del monumento a Pachacuteq, de quitar espacio en la av El Sol a los vehículos con extensas veredas o el de haber convertido la plaza mayor de la ciudad en un mercadillo persa donde se vende desde rocoto relleno hasta turismo sexual y los portales especialmente donde quedaba el café Ayllu convertidos en basurales y nuevos pueblos jóvenes de los turistas mochileros y del puterío nocturno en general.
Estos miserables completan su cofradía con los que viven en otras regiones, como en Lima por ejemplo, donde encontramos a la miserable hija del delincuente Fujimor que reside en los sótanos y las cloacas de la inmoralidad, que abandonó a su suerte a su madre, para convertirse en cómplice moral y material de su padre y poder succionar de la mamadera del pueblo para dedicarse a estudiar y vivir a cuerpo de rey en los yunaites, la acompañan a esta toda la parafernalia de miserables metidos a políticos, desde los ultra derechistas hasta los cavernarios comunistas que por ahora caminan con pieles de cordero sobre sus corvas, todos estos planean hacer alianzas inclusive contra natura con tal de asaltar el poder, desvalijar las arcas fiscales y llevarse los lingotes de oro y billetes en efectivo en centenares y millares de maletas que serán trasladadas en franco robo sistemático en los vuelos del avión presidencial también conocido como avión parrandero o avión postal.
MARCO V. SANTOS
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